
Su novio, Randy, siempre la está abandonando para ir a pelearse con el otro equipo de fútbol o hacer bromas en su vestuario. Y en tres ocasiones distintas han atacado el coche de Randy mientras él y Lissa estaban dentro, besándose.
Lissa ya se ha cansado de tener que competir contra un montón de chicos por la atención de su propio novio. Así que decide poner fin a la rivalidad de una vez por todas: ella y las novias de los otros jugadores se ponen en huelga. Los chicos no recibirán ni besos ni caricias por parte de ellas hasta que ambos equipos dejen de pelearse.
Con lo que no cuenta es con un nuevo tipo de rivalidad: un enfrentamiento entre chicas y chicos que se basa en quién cederá ante su libido primero. Ni con Cash. DESCARGAR AQUI !